Desde el Grupo Municipal de VOX, y a propósito de la artificial polémica que desde el Partido socialista se está fomentando por una publicación referente al escándalo de las conversaciones de wasap filtradas a la prensa, queremos denunciar la hipocresía y cinismo del PSOE de San Vicente.
El partido socialista hace gala de tener una piel muy fina cuando son objeto de cualquier crítica, mientras que ellos, lejos de predicar con el ejemplo, ejercen en reiteradas ocasiones el insulto y descalificación como único argumento cuando se enfrentan a distintas formas de pensar.
Desde VOX animamos a cualquier ciudadano a leer los comunicados de prensa o las intervenciones en los plenos del PSOE de San Vicente, con Asun París al frente, y comprobar la retahíla de insultos que se profieren, fundamentalmente, al partido VOX y a sus votantes. Las malas formas del PSOE de San Vicente, llegaron a su cúspide cuando el pasado noviembre, ante una moción contra la inmigración ilegal que presentó el Grupo Municipal VOX, los concejales socialistas al completo boicotearon el pleno, levantándose y abandonando la sala, en un desprecio a la soberanía popular y a las instituciones democráticas que no ha tenido precedentes en nuestro municipio.
Términos como “machistas”, “racistas”, “xenófobos”, “ultras” etc. son una constante en cualquier intervención socialista que alude a la formación VOX, circunstancia fácilmente comprobable en cualquier buscador de internet. Por ello, sorprende ver cómo un partido tan habituado al insulto se muestra tan ofendido cuando desde una red social se hace un comentario jocoso, referente, además, a unas circunstancias que son ciertas.
Es memoria, no histórica, sino reciente, el grave escándalo que protagonizó el PSOE de San Vicente en el mandato de Jesús Villar con la filtración de conversaciones polémicas entre concejales y consiguientes ceses, lo que conllevó la ruptura del partido y sumió a San Vicente en una parálisis de gestión que aún está pagando el municipio. Esas luchas internas tuvieron como consecuencia, por ejemplo, la no ejecución de contratos e inversiones fundamentales que tuvieron que haberse realizado durante los 8 años de mandato socialista, y que ahora este equipo de gobierno del que VOX forma parte, está consiguiendo llevar a cabo.