PSOE: «El PP no estaba obligado a pactar en San Vicente con un partido que no cree en la violencia machista ni ha firmado el pacto de buen gobierno»

El recién formado nuevo grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig, con cuenta con el respaldo de la Ejecutiva Local, ha criticado este sábado durante el pleno de investidura que el candidato del PP, Pachi Pascual, se haya apoyado en Vox, un partido de extrema derecha «que no reconoce la violencia machista», para lograr una mayoría absoluta «que no necesitaba» para ser alcalde de la ciudad, puesto que los ‘populares’ fueron la lista más votada apenas 500 votos por encima del PSOE.

El que ha sido primer edil de San Vicente y candidato a revalidad la Alcaldía para los socialistas en mayo, Jesús Villar, ha dado la enhorabuena de nuevo al PP pero ha confirmado que el PSOE «no iba a facilitar» la investidura de Pascual por «respeto a nuestros votantes» y porque «desde el principio tenían claro que su principal apoyo era Vox». «El PP ha seguido la estela de Carlos Mazón en la Generalitat y ha dado entrada a la extrema derecha en las instituciones, una situación que nunca puede ser una buena noticia para la democracia y los derechos humanos», ha indicado Villar.

En su intervención, ha recordado la negativa del partido ultra a formar el Código de Buen Gobierno de la Federación Española de Municipios y Provincias: «Fue el único grupo que no lo firmó, y ahora el PP, sin reparos, pacta con ellos el nuevo gobierno municipal». Así, tanto Villar como la nueva portavoz del grupo, Asun París, han remarcado que «ahora vamos a defender las propuestas que llevamos en nuestro programa electoral y que son un compromiso con San Vicente; pero que no le queda la menor duda al PP, y su socio de extrema derecha, que será el PSOE el que recuerde a la ciudadanía que sus mentiras en campaña electoral tendrán las patas muy cortas».

Por último, París ha recalcado que el PSOE hará una oposición muy «fiscalizadora» e «intensa» desde «el primer minuto». «La entrada de la extrema derecha en un gobierno municipal supone un peligro para los derechos de las mujeres y de muchos colectivos sociales; es un retroceso, una vuelta al pasado más rancio», ha agregado.